martes, 19 de octubre de 2010

SEVILLANIZACIÓN

Ahondando un poco en lo que nos contaba Antonio Ramirez, dice la RAE:

Nacionalizar
1. tr. Naturalizar en un país personas o cosas de otro.
Españolizar
1.    tr. Dar carácter español.

El fútbol entró en España de la mano (o de los pies) de los Británicos navegando en Barco a través del río que baña Andalucía y desembarcó en el puerto de Sevilla donde encontró un terreno idóneo para asentarse.

Los británicos, que allá donde van exportan sus costumbres, no tardaron en crear una Sociedad de Football y en ir enseñando ese divertido sport a los sevillanos con los que mantenían relaciones tanto personales como profesionales.

Es por ello que la primera Sociedad de Football de la ciudad tuviera un carácter netamente británico, pese a que algunos de sus integrantes fueran nacidos en Sevilla.

Son varios los factores que con el tiempo van promoviendo la nacionalización, españolización o porque no, permítanme la licencia lingüística, Sevillanización de dicha sociedad.

Por un lado cada vez lo practican más sevillanos que poco a poco se hacen parte más importante de la sociedad y van haciéndola suya. Probablemente también, al ser practicado cada vez por más sevillanos, este debe ser formalizado conforme a las leyes españolas, bien para solicitar apoyo al ayuntamiento, bien para dejar de ser una actividad digamos un tanto “alegal”. Por otro lado, los fundadores primeros se van haciendo mayores y además algunos van dejando de tener relación estrecha con la ciudad.

En definitiva, la dirección de la Sociedad de Football va pasando de manos británicas a manos sevillanas no de una forma rápida, sino de forma paulatina, probablemente bajo la supervisión de los socios originarios.

Como vemos en la tabla, la primera directiva tenía el marcado carácter británico que se desprende de los apellidos que integran la misma, pese a que algunos elementos como Isaías White fuese nacido en Sevilla y disfrutara de la doble nacionalidad.

En la directiva de 1905 sin embargo ya vemos que los apellidos netamente españoles son mayoría, encontrando tan solo dos de origen británico.

Definitivamente en 1908 la directiva al completo tiene carácter nacional, lo cual no quiere decir que los integrantes británicos de la sociedad desaparecieran ni mucho menos, pues de hecho, a falta de rivales con los que competir, se disputan partidos entre la facción británica y española de la Sociedad, probablemente para aportar un plus competitivo a aquellos partidos.

Poco a poco, como hemos visto, la Sociedad de Football, The Club, o en último término, el Sevilla Fútbol Club, se va SEVILLANIZANDO hasta convertirse en el eterno campeón de Andalucía y principal estandarte del deporte sevillano y andaluz para orgullo de todos nosotros, aunque sigamos manteniendo lazos, incluso fantasmagóricos, con nuestra querida ascendencia Escocesa.


PD: No, aún no tenemos el documento que afirme de forma literal que las socidades de 1890 y 1905 son exactamente la misma. No lo tenemos pero, ¿acaso es necesario?

4 comentarios:

  1. Pues yo creo que no es necesario. Pero claro, a algunos hay que demostrarle las cosas, y a veces ante un notario. Un abrazo.

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  2. Sevillanía, esa es la palabra.

    Muy acertado el post.

    Somos muchos los que estamos convencidos de que los que jugaron en Tablada en 1890, y los actuales campeones de España, son miembros de una misma sociedad: el SEVILLA FÚTBOL CLUB.


    Esa seguridad es la que nos anima a seguir buscando esa pieza perdida del puzzle, pero que tiene que estar en algún sitio.

    No hay cirmen perfecto.

    Cuando algo sucede, las pruebas, tarde o temprano aparecen.

    Afortunadamente, cada vez son más los organismos, incluso extranjeros, que están colaborando con nosotros, profesionales de la investigación que tienen lo nuestro en mente, y no digo con esto que dediquen sus horas a buscar lo que le hemos pedido, sino que están alerta, y en cualquier suelto, puede saltar la noticia.

    Pueden pasar dos días, dos semanas o dos años, pero tras los ciento veinte que llevamos de espera, se intutuye el desenlace.

    No desfallezcamos que la próxima invitación será como hurras por la reina de Inglaterra...

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  3. Allá donde esté el eslabón perdido iremos a buscarlo, aunque tengamos que llegar hasta Canadá para encontrarlo.


    ;-)

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  4. Magnífico D. Alejandro, Vd. ya sabe que yo comparto esta teoría, que bien ha sabido llevar a su extremo. Enhorabuena.

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